En la Plazoleta 10 de Mayo, ubicada en el ingreso al Cementerio San Gerónimo y erigida en memoria de los 37 fallecidos, se recordó el 70 aniversario de la tristísima jornada del sábado 10 de mayo de 1952, cuando en el transcurso de la velada boxística en la parte descubierta por entonces de la sede del Club Argentino, por la cantidad de agua de lluvia recibida, cedió una pared y una viga que sostenía un improvisado techo de lona, aplastando todo lo que tenía a su paso.
El acto, organizado por el Club Argentino y con el acompañamiento de la Municipalidad, contó con la presencia de las principales autoridades de la entidad deportiva, el intendente Carlos Briner, familiares y amigos de las víctimas.
Hubo un minuto de silencio y se descubrió una placa conmemorativa por los 70 años del luctuoso hecho que permanece vivo en la memoria de todos los bellvillenses.
El presidente del Club, Adrián Gómez, destacó que su Comisión como las que le antecedieron desde esa dolorosa fecha, “llevan prendidos en sus corazones ese duelo. Nuestro pesar nos acompaña año tras año, ya que desde aquel momento la institución quedó con una secuela permanente, que nos aflige y nos lastima cada día más”.
En tanto, el intendente dijo que “los bellvillenses siempre fuimos capaces, ante la adversidad, de dar las manos, los brazos y seguirlo haciendo sin cansancio”, al referirse a los gestos de ayuda y solidaridad evidenciados por la comunidad en las horas y días posteriores al sucesos.
Rescató la figura del delegado comunal de esa época, don Segundo Ramón Vivanco, que al brindarse por entero en las tareas de socorro a la víctimas, sufre un accidente que con el correr de los días, causaron su muerte.
Y reflexionó: “Cuando de una u otra manera nos dedicamos a la sociedad, al que sufre, al que siete necesidades, vamos dejando algo y vamos gastando la vida”.
Culminó diciendo: “mi abrazo, mi afecto y mi cariño a la institución, al igual que a los familiares, a los descendientes, a los amigos y a la ciudadanía en general, porque esto es muy caro al corazón de los bellvillenses”.
Vale destacar que al descubrimiento de la placa por parte del municipio y el Club, se le sumaron ofrendas florales de ambos instituciones y de Hospital, Bomberos Voluntarios y Policías.
Asimismo, el párroco Carlos Fillol bendijo la placa y pronunció una oración por los fallecidos en aquel trágico día.
