Antes de la colocación del barbijo, se debe hacer lavado de manos con agua y jabón o con un desinfectante a base de alcohol.
Mientras se coloca, hay que asegurar que la boca y nariz queden cubiertas, sin espacios libres.
Durante su uso, se debe evitar tocar el barbijo.
No se debe colocar el barbijo en el cuello, tampoco en la frente ni en la cabeza, ni transportarlo en la mano o colgado.
En caso de tocarlo, se recomienda lavarse las manos con agua y jabón o con desinfectante a base de alcohol.
Se indica cambiar el barbijo en cuanto esté húmedo o visiblemente sucio.
Para sacarlo se recomienda hacerlo por detrás, sin tocar la parte delantera. Luego de utilizarlo, se lo debe colocar inmediatamente en un recipiente cerrado. A continuación, es necesario lavarse las manos con agua y jabón o con desinfectante a base de alcohol. Para higienizar el barbijo, es suficiente lavarlo con jabón manual o en lavarropas.
Cabe aclarar que los barbijos no deben ser usados en niños y niñas menores de dos años, ni por personas con problemas respiratorios o que presenten dificultades para retirarse el barbijo.