A partir de las recomendaciones para adaptarse a la nueva realidad por Covid-19 y generar espacios más seguros, el COE Bell Ville se hace eco de las propuestas del Ministerio de Salud para el automanejo del riesgo de contagio, mediante elecciones de carácter individual o familiar que lo reducen o aumentan.
En base a investigaciones nacionales e internacionales, la comunidad puede manejar el riesgo de contagio a través de la interacción de diferentes variables, como el uso adecuado del barbijo, la cantidad de personas en un encuentro, la consideración de los aerosoles al hablar, la ventilación del ambiente y el tiempo de exposición.
Incorporación de hábitos:
La nueva realidad social que plantea la contingencia por Covid-19, requiere que la comunidad adopte nuevas prácticas y hábitos para generar situaciones sociales seguras.
De esta manera, puede verse cómo el uso adecuado del barbijo es clave para cualquier tipo de interacción social.
Sugerencias:
Conocer los factores de riesgo permite a las personas dinamizar, medir y manejar el riesgo a que se exponen en determinadas situaciones sociales y optar por actitudes y actividades más seguras.
El riesgo de infección se reduce a menos de una persona contagiada cuando el grupo usa el barbijo de manera adecuada, acorta la duración del encuentro a la mitad y ventila el espacio.
De esta manera, es recomendable mantener el uso adecuado del barbijo durante todo tipo de interacción aun estando en espacios cerrados.
Se propone también la necesidad de considerar los aerosoles emitidos por las personas al respirar, hablar, gritar, toser o cantar y, que, al dispersarse en el espacio, forman un aerosol que se considera infeccioso al ser inhalado.
En este sentido, otro de los hábitos seguros es elegir interaccionar con otras personas –en lo posible no más de dos- en ambientes con buena ventilación, y más aún al aire libre.
En cuanto a la ventilación de los ambientes interiores, la ventilación natural es el método más efectivo para renovar el aire, así como necesaria para crear un ambiente sano y evitar otras infecciones además del coronavirus.
De esta manera, es recomendable asegurar el recambio de aire mediante la abertura de puertas y ventanas -en lados opuestos- que produzcan circulación cruzada del aire, con diferencia de temperatura interior-exterior para generar corriente.
En el caso de espacios donde las ventanas no pueden abrirse, se recomienda el uso de ventiladores mecánicos que expulsen el aire del interior hacia afuera, en contraste al uso del aire acondicionado –método que no es seguro, debido a que no se genera una renovación y circulación del aire-.
Además, de acuerdo a los tipos de ambiente y principalmente en instituciones públicas y privadas, se propone la utilización de equipos extractores o impulsores individuales si la ventilación natural no es suficiente, así como el uso de equipos provistos de filtros para purificar el aire.
Mayor información sobre el tema la puede encontrar haciendo clic aquí: https://www.cba.gov.ar/covid-19-como-controlar-el-riesgo-de-contagio-en-la-nueva-realidad/