Personal de las dos direcciones de la Secretaría de Desarrollo Social de la Municipalidad estuvo presente desde el primer momento de la crisis hídrica -y durante toda la semana- en barrio Los Espinillos, el sector de la ciudad afectado por el temporal del pasado fin de semana.
Acción Social, a cargo de Marcela Barbero, relevó el sector y estableció que 40 familias afrontan distintas consecuencias por las copiosas precipitaciones.
Se les entregó agua mineral, lavandina, leche y pañales, entre otros insumos. Además, se repartieron botas de agua.
Junto a representantes del Ministerio de Desarrollo Social provincial, los profesionales del municipio relevaron el miércoles las necesidades de cada grupo, en función de las declaraciones de estado de emergencia (por parte del Ejecutivo local) y de zona de desastre (por parte del Ejecutivo cordobés).
Ese estudio se hizo con el objetivo de que los damnificados reciban lo antes posible la ayuda económica para mitigar los daños.
En el plano sanitario, Salud Pública instaló puesto de vacunación y entregó medicamentos.