Como cada año, la Guardería Constancio C. Vigil festejó el Día de la Familia y celebró con juegos y canciones los vínculos que se forman en la instrucción, que cumple un rol fundamental para la comunidad.
Cabe recordar que en 2014 la guardería se convirtió en salas-cuna. Las edades de los niños que acuden son de 1 a 3 años.
La directora de Acción Social Marcela Barbero precisó que a la fecha hay 36 infantes divididos en tres salas, según su franja etaria, con sus respectivas docentes.
El centro educativo cuenta con dos cocineras y dos personas abocadas a tareas de maestranza. También tiene personal de economato, encargado de organizar las compras para organizar y cocinar los menúes diarios, que se elaboran a partir de las instrucciones que da la nutricionista del municipio.
Los niños desayunan, luego hacen una colación y almuerzan. Dos veces por semana reciben clases de educación física, con la coordinación de la Dirección de Deportes de la Municipalidad.
A través del juego, las maestras ponen pautas para que, entre otras cosas, los pequeños incorporen pautas como el lavado de manos y el cepillado de diantres y la alimentación sana.
A su vez, si es necesaria la estimulación temprana de algún alumnito, las educadoras los derivan a la psicomotricista o psicopedagoga del equipo interdisciplinario. Siempre se trabaja en coordinación con las distintas áreas del municipio, especialmente Salud Pública, para controlar vacunas, talla, peso y otras variables.
Además, hay distintos talleres dirigidos a los padres, enfocados en el cuidado y en el desarrollo saludable de los niños.
 
			 
								 
								 
			        









