Dignísima actuación cumplió el bellvillense Pedro Cachin en su enfrentamiento de ayer en el Masters 1000 de Madrid, frente al gran Rafael Nadal.
Un feliz y a la vez preocupado Pedro, no se intimidó ante tan gigantesca figura y le opuso tanta resistencia como la que se cuerpo pudo soportar, demandándole una trabajada victoria al ídolo de Mallorca. El bellvillense se quedó con uno de los parciales: 6-1, 6-7 y 6-3, en tres horas y cuatro minutos de duro batallar.
La prensa mundial se hizo eco de la sencillez del bellvillense, cuando al término del partido y al saludarlo, lo sorprendió a Nadal con estas palabras: “Me cumpliste un sueño. Gracias. No sé si es el protocolo, pero ¿puedo quedarme con algo tuyo, me podés dar tu camiseta?”. La imagen y el pedido, recorrieron el mundo.
Es así que el ganador sacó de su bolso indumentaria personal que depositó en manos de Cachin. Su figura cobró magnitud, como persona por su simpleza y humildad, siendo un refuerzo al gran ejemplo que legítimamente por su personalidad supo ganarse “nuestro” Pedro.
Pronto, ambos tendrán una nueva función en la vida deportiva y Cachín será visto por el mundo con otros ojos, el de un “muy buen tipo, dentro y fuera de la cancha”.
