La XIX Fiesta Nacional de la Pelota de Fútbol, se reservó para el viernes un cúmulo de emociones en derredor de la figura de Mario Alberto Kempes. Entre varios momentos especiales que los bellvillenses disfrutaron junto al ídolo, fue escucharlo en recuerdos, pensamientos y definiciones que surgieron de su diálogo con el periodista Gustavo Gutiérrez, otro hijo de Bell Ville que ha consumado una dilatada trayectoria en los medios de comunicación, desempeñándose de varios años a esta parte en Cadena 3, cubriendo eventos del mayor orden nacional e internacional.
Esta circunstancia de pertenencia mutua de parte de Kempes y Gutiérrez, quedó de manifiesto ante una sala llena que, cautivada y respetuosa, fue testigo de un repaso de diferentes aspectos de la vida de “Marito”.
Desde vivencias transcurridas en su niñez y juventud que le permitieron crecer en el fútbol, hasta los fuertes cambios personales que significaron arribar a Instituto de Córdoba, luego a Rosario Central y posteriormente emigrar al Valencia de España.
El Botín de Oro como máximo goleador y Balón de Oro como mejor jugador del Mundial 78, con su habitual sencillez también abordó el capítulo de la Selección Argentina a partir de sus primeras convocatorias, reflejando las distintas sensaciones y vicisitudes por las que fue pasando hasta llegar a coronar todo con la obtención de la Copa del Mundo.
Al respecto, Kempes contó con lujo de detalles cuando en enero de 2020 y como invitado de honor, visitó el Museo del Fútbol Mundial de la FIFA y recién en ese acontecimiento, después de 42 años, pudo tener el dorado trofeo en sus manos y saldar una cuenta pendiente.
El colofón y el encendido aplauso llegó cuando Mario puso de manifiesto su cariño por Bell Ville, dejando entrever que un futuro estar viviendo aquí es una posibilidad que contempla una vez que cumpla con sus vigentes compromisos.