Enmarcado en el proyecto de panadería que año tras año se utiliza para capacitar a los niños y sus familias en este rubro alimenticio, los pequeños de la Guardería Constancio C. Vigil, acompañados por docentes y madres, visitaron el palacio municipal ofreciendo degustaciones de churros chaqueños.
Cocineritas y cocineritos ofrecieron sus riquísimos productos, acompañados de una sonrisa y la satisfacción de haber hecho bien el trabajo que les encomendaron.
La especialidad en este tipo de churros, fue hecha por receta de una familia oriunda del Chaco que reside en la ciudad y sus hijos concurren a la Guardería.
El taller de pan con madres, abuelas y algunos padres permiten mezclar, tamizar y amasar historias que acercan como personas, cada uno desempeñando sus roles.
La labor refuerza los lazos familiares, aumentando a la vez, la autoestima y la amistad reinante en el grupo.