En secretario de Obras, Servicios y Ambiente, Ernesto Borrageros, informó que el municipio solo levanta de la vía pública los restos de podas mayores o a granel, desde mayo y hasta agosto de cada año, por lo que fuera de esa temporada, es el propio frentista quien debe hacerse cargo de su traslado hasta los lugares habilitados para tal fin.
La recolección solo alcanza a podas menores y limpieza de jardines, las que deben ser embolsadas. La ciudad está dividida en cinco zonas, donde semanalmente se cumple ese servicio, llamado “bolseo”.
“En este período del año, en el que se recomienda no podar los árboles por el perjuicio que se les causa al estar en su ciclo vital más importante, no se hace la recolección de restos de podas. Eventualmente, si esta intervención es necesaria por deformaciones de la planta, riesgos de desprendimientos de ramas, etc., se debe contratar los servicios de un contenedor o trozarlo para ser embolsado y cumplir con el sistema de bolseo”, aclaró el funcionario.