Con el acompañamiento del personal de cocina y docentes, los concurrentes a la Casa del Niño tomaron parte activa en la elaboración de productos de panadería.
En el taller de cocina de la institución elaboraron con sus manitos alfajores de maicenas (niñas y niños de 6 a 9 años) y galletitas (pequeños de 4 y 5 años).
Estos productos los llevaron a sus hogares como una forma de compartir en familia lo que cada integrante puede aportar.
Además crea hábitos saludables como el cuidado de la higiene en el proceso de alimentos y la formación desde pequeños en la importancia de la comida equilibrada.
Los talleres de cocina para niñas y niños se hacen en un ámbito donde en forma inclusiva se proponen actividades formativas, seguras y divertidas. Están pensados en motivar a desarrollar una conducta nutricional adecuada y con recetas fáciles que pueden ser repetidas en casa.
Los alimentos que se utilizan son sanos y los pequeños pueden tocarlos, observarlos y olerlos para que se familiaricen con ellos y los hagan sentir como en su propio hogar.
Otra de las ventajas es fomentar habilidades sociales al realizar la tarea de cocina en equipo.