El escudo de la República Argentina fue aceptado oficialmente el 12 de marzo de 1813 por la Asamblea General Constituyente de ese año. Antes de conocerse el decreto que aprobara su diseño, ya se empleaba el actual escudo.
A pesar de la ausencia de sanción legislativa, el hecho de que Manuel Belgrano lo usara como símbolo central del gallardete de las tropas emancipadoras, consagró el emblema. Fue adoptado por pueblos y gobiernos como símbolo de la nacionalidad argentina.
El símbolo de cada uno de sus elementos
El gorro frigio es un antiguo símbolo de libertad que caracterizó a la Revolución Francesa en 1789.
La pica es una especie de lanza corta que representa la voluntad de defender la patria.
Las manos entrelazadas representan la unión y la hermandad de los pueblos de las antiguas Provincias Unidas del Río de la Plata.
El sol naciente indica el nacimiento de la nueva nación.
Los laureles representan los triunfos de los patriotas sobre los realistas en las batallas de Suipacha, llevada a cabo el 7 de noviembre de 1810, y de Tucumán, desplegada el 24 de septiembre de 1812.
Las cintas celestes y blancas representan a la Nación Argentina, repitiendo los colores patrios del centro oval del escudo.